Para una persona como yo, cordobesa de nacimiento aunque criada en Madrid, que regresa a su tierra de nacimiento con 24 años. Que realmente es a esa edad en la que comienza a conocer la cultura, fiestas, costumbres y tradiciones de su tierra... es un orgullo inmenso, una alegría inusitada y una tremenda responsabilidad, ponerse ante un micrófono y un gran número de paisanos para cantar y contar los sentimientos que inspira el Arcángel San Rafael. Una figura omnipresente en cada rincón de Córdoba, que los cordobeses llevan en su alma como a su propia familia, como algo muy suyo, muy cercano y amado.
Y así es. El Arcángel que libró a Córdoba de la peste en el año 1278 cuando nuestra urbe era azotada cruelmente por dicha enfermedad. En ese año, se apareció el arcángel San Rafael al padre Simón de Sousa, comunicándole el deseo del Altísimo de que el obispo de la ciudad, don Pascual, ordenara poner una imagen de San Rafael encima de la torre, obligándose a celebrar fiesta en su honor y prestar veneración por la ciudad, y que con esto cesaría el contagio. El prelado ejecutó el mandato, desapareciendo el terrible mal que castigaba a la ciudad.
En el siglo XVI la peste asolaba la ciudad de Córdoba, cuando el arcángel San Rafael se le apareció al padre Roelas en cuatro ocasiones revelándole que él salvaría a la ciudad. El sacerdote, temeroso de que todo fuera un engaño de sus sentidos y después de consultar el caso con teólogos de la Compañía de Jesús, visitó al Provisor, quien le ordenó que si se producía una quinta aparición, le preguntase quién era. Así fue, en la madrugada del 7 de mayo de 1578, se produjo esta quinta aparición en la que San Rafael le dijo al sacerdote:
"Yo te juro por Jesucristo crucificado, que soy Rafael, ángel a quien Dios tiene puesto por guarda de esta ciudad".
Y así ha sido desde entonces.
Ayer noche en la Diputación de Córdoba, con un salón lleno a rebosar, tuve la maravillosa oportunidad y privilegio de hacer el Pregón de San Rafael con el que la Federación de Peñas Cordobesas, homenajea al Custodio de la ciudad año tras año. Y en este 2024 he sido designada por unanimidad para hacerlo. Un pregón hecho desde y para el corazón, en el que trazo un recorrido por los distintos triunfos que el Arcángel tiene en las calles cordobesas. Un pregón que he hecho con el alma y los cinco sentidos. Y que, a juzgar por la cálida ovación de casi 4 minutos del público asistente, y por los comentarios que tuve ocasión de escuchar tras su finalización, ha calado intensamente en el público y en los medios de comunicación que se han hecho eco del mismo con todo respeto y exhaustividad.
A la Federación de Peñas Cordobesas mi más sincero agradecimiento porque para mí ha sido una experiencia enriquecedora y totalmente inolvidable, que siempre guardaré en mi corazón con un cariño muy especial. A mi compañero de radio Antonio David Jiménez mi cariño y también mil gracias por hacer una presentación tan preciosa de mi persona.
A el Alcalde de Córdoba, José María Bellido, también mi agradecimiento por su cariñosas y sinceras palabras. Él también recordaba su pregón de hace 2 años con mucha ilusión. Gracias a l@s compañer@s de los medios de comunicación de Córdoba por su estupenda labor para informar sobre el evento.
Al grandísimo artista Antonio Guerra por ese cartel impresionante que ha humanizado y hecho mucho más cercano a San Rafael. A María José, mi pareja y a mis amigos del alma que estuvieron compartiendo conmigo una noche tan especial. Y un momento tan importante para mí.
Y gracias a San Rafael por protegerme, por darme su inspiración y su luz para escribir el pregón y saber pronunciarlo después.
Querido Arcángel, que sigas custodiando esta ciudad de Córdoba que tanto amo y nos custodies a todos bajo tus protectoras alas. "Medicina Dei".
Ahora algunas fotos del evento: