sábado, 1 de octubre de 2022

Moliendo Versos 30 de septiembre

CUARTA SESIÓN DEL V CICLO DE POESÍA MOLIENDO VERSOS.

REAL JARDÍN BOTÁNICO DE CÓRDOBA.

VIERNES, 30 SEPTIEMBRE 2022

                                  
                                                              ©  Foto: María José Mures
Se considera a Aristóteles como el fundador de la Retórica, tal y como ha llegado hasta nuestros días. Igual ocurre en el ámbito de la Poética: Aristóteles es el primer autor occidental que concede autonomía a la Poesía, al definirla como manifestación artística que se diferencia de otras –música, pintura, escultura…” por el instrumento peculiar que se emplea en sus creaciones: la lengua.

Se ha hablado mucho de los orígenes y de los horizontes que comparten la poesía y la filosofía. Gran parte de los reparos hacia la poesía se ubican del lado de la filosofía. Platón, por ejemplo, es el primero en enfrentar a la poesía y, a partir de allí, el pensamiento occidental se encumbró en una larga y compleja discusión.

Es posible establecer lazos dinámicos, dialógicos y creativos entre el pensamiento y el poema, entre la metáfora y el concepto, entre la realidad y el placer, entre las razones y los sueños. La crítica y estudiosa Sultana Wahnón escribe que: “cuando el poeta se presentaba a sí mismo en primera persona, en lugar de imitar lo que otros personajes ficticios decían, el contenido de la poesía podía ser tan o incluso más “verdad” que el de la filosofía.

Nuestra verdad, la de los poetas, es una realidad más que innegable. La poesía está tan llena de pensamientos como la filosofía, no la diferencia el grado de adecuación de esos pensamientos a la verdad, el modo de ser producidos: mediante el razonamiento los de la filosofía (las ideas) o mediante la inspiración los de la poesía (Mitos). Una de las mujeres que en pleno siglo XX, reflexionó sobre el verbo poético frente al logos razonador, es María Zambrano. Decía que la poesía es la palabra puesta al servicio de la embriaguez. Y en la embriaguez el hombre es ya otra cosa que hombre; alguien vino a habitar su cuerpo; alguien posee su mente y mueve su lengua; alguien le tiraniza. No solo se conforma con las sombras de la pared cavernaria, sino que sobrepasando su condena, crea sombras nuevas y llega hasta hablar de ellas y con ellas.

Todo esto que les cuento es para poner de relevancia la implacable importancia de la poesía, su misterio que a veces alcanza la propia condenación.

Hace un mes nos pusimos a moler versos; ha sido una buena cosecha la que hemos recogido. Como dice un refrán: “Dios nos libre y nos defienda del que hace mala molienda. Del que se queda a escondidas con una parte de lo que muele”. O “molino que no anda, no gana”. O “Molino que no muele algo le duele”.

Lo que más nos duele hoy es que finalice este V Ciclo de Moliendo Versos que este año hemos querido compartir con nuestros poetas molineros de Castilla-La Mancha porque cuando soplan vientos de cambio, alguna gente hace muros mientras otras construyen molinos de viento. Es lo que hemos hecho durante todo este mes de septiembre.

Gracias a esos poetas a los de allí, a los de aquí, a todos ustedes que nos han ayudado con su apoyo y con su presencia. Gracias al excelente personal del Real Jardín Botánico de Córdoba: Lorena Caro (Coordinadora), Carolina Luque (Diseñadora del cartel y el tríptico del Ciclo), Benito José Hidalgo (el creador de las figuras de madera que hemos entregado a lo largo del ciclo), (el sonido y la iluminación de Mario Karspinki), las presentaciones de los poetas que han corrido a cargo de Miguel Yuste. Al cuarteto de cuerda de la Joven Orquesta de Córdoba que nos acompañó los dos primero viernes, a las alumnas del Conservatorio Profesional de Danza “Luis del Río” de Córdoba. A todos los poetas participantes que han puesto voz y corazón cada viernes. A todos quiero que les brinden ustedes un aplauso que llegue a lo más alto.

Les emplazamos para el próximo año. Quedarán más campos por sembrar, quedarán más cosechas por recoger, quedarán más molinos que poner en marcha. Y ustedes serán nuestros acompañantes en esa tarea. Gracias por renacer cada otoño en esta iniciativa que quien les habla, Pilar Sanabria, puso en marcha, que vive en sus sentidos, que solo pretende regalar belleza, que solo es esto poesía a manos llenas.
PILAR SANABRIA CAÑETE

Isabel del Rey

    Antonio José Muñoz Béjar

Virginia Sánchez

                    Alumnas del Conservatorio Profesional de Danza “Luis del Río” de Córdoba

Ganadora del Premio Nuria Villar


                    Alumnas del Conservatorio Profesional de Danza “Luis del Río” de Córdoba

Entrega de diplomas




No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENCUENTRO LITERARIO

  A veces los sueños se hacen realidad. Y los deseos se cumplen. Eso me sucedió a mí este pasado sábado en mi localidad de raíz afectiva, en...