ANTOLOGÍA SILENCIO

Ayer tuvo lugar la presentación de la antología: "Silencio. Poesía 1994-2021", del poeta de Baena, residente en Aguadulce (Almería) hace ya 25 años. En el mismo acto fue también presentado su último libro de poemas, "Sepulta Plenitud". Tuve ocasión de compartir dicha presentación con el propio autor, José Antonio Santano y con los compañeros y buenos amigos poetas Soledad Zurera y Alejandro López Andrada. La presentación se desarrolló en la actual sede del Ateneo de Córdoba, ubicada en el céntrico local de Hermandades del Trabajo.

Un público no demasiado numeroso pero sí entusiasta de la poesía, acudió al evento y arropó con su cariño al poeta y a los presentadores.

Los poemas de José Antonio Santano, intensos. Son producto de una obra sembrada de manera fructífera, abundante y meditada. Poemas que por raíz llevan el nombre del "silencio", pues es a través de ese demoledor rictus del alma, de dónde pueden nacer y hacer su nido persistente estos versos. Del silencio como refugio se ampara la calidez, el frío, la luminosidad, la sobriedad, el cuerpo lírico de esta antología poética con su inmenso e intrépido bagaje existencias y literario.

La presentación de Soledad Zurera hizo alusión a la amistad existente entre ella misma y el propio Santano, sus recuerdos de la localidad natal del poeta, Baena. Su relación desde jóvenes con la poesía y algunos de los integrantes del Grupo Cántico. 

Por su parte Alejandro López Andrada habló del poemario "Sepulta Plenitud", de la belleza que encierra el descubrir los orígenes de una ciudad que es común a todas las ciudades, del impacto que tiene para la vida de cualquier ser humano reconciliarse con su memoria más o menos lejana, del significado de nuestras raíces a través del tiempo. En suma de la importancia que tiene conocerse y conocer todo lo que implica el recuerdo, la adolescencia, todos esos paisajes exteriores que hemos acumulado para poder vivir los interiores.

Dos bellísimos libros y la poesía que sigue ganando paso día a día a la rutina y al desaliento cotidiano. Enhorabuena  José Antonio Santano y mil gracias de nuevo al Ateneo de Córdoba por brindarnos, una nueva ocasión, su espacio acogedor, gracias a nuestro presidente, Federico Roca, a la secretaria Yolanda y a una buena amiga que está trabajando en Hermandades del Trabajo y que ayer, me encantó saludar de nuevo después de mucho tiempo, Blanca Córdoba.